El pasado 29 de mayo un hombre de unos 35 años entró en un supermercado de Zaragoza y se dirigió directamente a la zona de comida infantil, mirando nerviosamente a los lados, tal y como informa ‘El Periódico de Aragón’.
El hombre escondió en su ropa cuatro potitos y trató de salir del establecimiento sin pagar. Cuando llegó a la salida, le detuvo el vigilante de seguridad, quien, tras cachearle y encontrar los productos, llamó a la policía.
No obstante, nadie esperaba el desenlace de esta historia. Una vez llegaron al lugar dos agentes de policía, el detenido explicó que era padre y estaba en el paro. Muchos clientes del local, enterados de lo sucedido, ya se estaban ofreciendo a pagar los potitos.
Tras escuchar la versión del detenido, del vigilante y hasta de los clientes, uno de los policías indicó al hombre que podía marcharse, afirmando que «no había nada contra él«. El agente pagó de su bolsillo los cuatro potitos.
????Un padre de familia sustrae 4 potitos en un supermercado de #Zaragoza. Es sorprendido y llaman????a la @policia
El agente????♂️ que acude, viendo la necesidad del hombre, paga la comida infantil y lo deja ir#MicrocuentosReales#FelizLunes#SomosTuPolicía https://t.co/VsZF1vgDsg pic.twitter.com/gUmfKr10H4
— Policía Nacional (@policia) June 8, 2020