El Ministerio Fiscal ha pedido ocho años de prisión «por lesiones» para Adaia, una joven acusada de arrancarle la lengua de un mordisco a su pareja durante un beso cuando éste le dijo que quería poner fin a su relación.
El suceso se remonta a febrero de 2017, cuando el chico, «harto de sus cambios de humor», le dijo a Adaia de quedar con ella para comunicarle que quería acabar la relación. La joven no se lo tomó nada bien y pasó a destrozar todos los objetos de su piso.
Un tiempo después de este violento suceso, se reconciliaron y retomaron la relación, pero los problemas de ira de la joven de nuevo les impidieron mantener una pareja feliz y estable, a lo que el joven decidió cortar con ella una segunda vez.
Adaia volvió a reaccionar violentamente antes de marcharse de la casa, aunque regresó minutos después arrepentida pidiendo perdón. Tras fundirse en un abrazo, ella le pidió un último beso: fue ahí cuando le arrancó la lengua y la escupió en el suelo, dejando al chico desangrándose.