‘Cheesed challenge’. Así es como los creadores de esta práctica han nombrado al nuevo reto, que consiste nada más ni nada menos en tirarle una loncha de queso en la cara a bebés o niños pequeños y esperar a ver si se la comen o la tiran al suelo.
El reto comenzó cuando un usuario subió un vídeo a Twitter acompañado del mensaje «I just cheesed my lil brother» (acabo de ‘quesear’ a mi hermano pequeño). El vídeo obtuvo más de siete millones de reproducciones y tardó poco en convertirse en un trend copiado en todo el mundo.
Estos son algunos de los vídeos que se publicaron bajo el hashtag del reto: