Margarita del Val, la mayor experta viróloga del CSIC, ha asegurado en Espejo Público que la manifestación feminista del 8 de marzo no fue el único evento multitudinario que se celebró ese día incluso en espacios cerrados.
“Se podían haber prohibido las manifestaciones del 8 de marzo, los partidos de fútbol, se podría haber limitado el transporte público, se podían haber cerrado los restaurantes, se podía haber evitado montarse en taxi porque estaba el aire lleno de, a lo mejor, el paciente anterior que había tosido y se quedaba ahí retenido, se podía haber limitado la asistencia a los platós de televisión, que también es una mezcla continua de gente nueva. No hicimos nada de todo eso”, le dijo a Susana Griso.
“Ahora no vale quejarse sólo de una de las actividades, lo siento por ustedes. Es decir, nos tenemos que quejar de todas. Yo les cuento mi experiencia personal: yo fui a un restaurante y me arrepentí. Y el domingo decidí no ir a la manifestación”, espetó Del Val, quien recordó que ahora se sabe (y antes no) que «las actividades en sitios cerrados son muchísimos más transmisoras de la infección de lo que son en sitios abiertos».
