En plena campaña electoral, La Vanguardia preparó y ofreció un tenso debate entre los candidatos por Barcelona a las elecciones generales del 28-A.
Entre los participantes se encontraban Jaume Asens, Laura Borràs, Meritxell Batet, Inés Arrimadas, Gabriel Rufián y Cayetana Álvarez de Toledo. Concretamente, estos dos últimos protagonizaron uno de los momentos más tensos de las dos horas de debate.
Álvarez de Toledo le exigió a Rufián que él y su partido pidan perdón por el referéndum, pero el de ERC le propuso algo incluso mejor: «Yo le propongo un trato: yo pido perdón por el referéndum si usted pide perdón por la gürtel«.
La popular se quedó sorprendida ante las palabras de Rufián, a quien le reprochó que sus palabras fueron «pobres»: «Qué respuesta Dios mío, de verdad…», agregó. A lo que Rufián la remató con uno de sus habituales zascas: «Si yo soy el de los argumentos pobres aquí…».