Unas imágenes aéreas en el cementerio más grande de Brasil, Vila Fomorsa, nos sirven para hacernos una buena idea de con qué brutalidad el coronavirus está azotando el país ante un Bolsonaro que permanece contrario a aplicar cuarentena.
Varios centenares de fosas cavándose para enterrar a los más de 22.000 fallecidos hasta la fecha. Una cifra que no parece bajar dada la bestialidad de infectados: 347.398.