Ante unos Mossos y Policías que parecían mirar para otro lado ante la oleada de ultras que salieron, bajo sus palabras, «de caza» la noche del 17 en Barcelona contra los manifestantes independentistas, los ciudadanos tomaron el mando.
Después de la brutal paliza que una docena de neonazs dieron a un joven manifestante, el ambiente se caldeó y la violencia se desató. Un grupo de personas salieron en busca de los agresores, encontrándose a uno de los presuntos autores y persiguiéndolo hasta propinarle una paliza entre varias personas y conseguir quitarle un cuchillo de grandes proporciones que portaba encima.
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Imagenes de antifascistas persiguiendo a los nazis que han salido huyendo y el nazi que ha sacado el machete se ha quedado tumbado un ratito pensando en su vida, enseguida se levanta. pic.twitter.com/XJ4jDO4mUA
— BajoElCieloDeMoscú (@VuelvaLaURSS) October 17, 2019
El presunto agresor neutralizado ya había amenazado con el arma blanca a varios manifestantes que le hicieron frente al grupo ultra que andaba por Barcelona agrediendo a los asistentes, reporteros y periodistas.
Contexto pic.twitter.com/hMcVF5srww
— jr? (@RocherJr) October 18, 2019
