La brutalidad policial continúa en las protestas de Estados Unidos el asesinato de George Floyd a manos de la Policía y contra el racismo constitucional.
Esta vez ocurrió en las manifestaciones de en Seattle, las cuales han terminado con una joven de 21 años en estado crítico tras un policía dispararle una granada directamente al pecho de la chica. Cuando esto ocurre, decenas de manifestantes y médicos voluntarios acudieron en su ayuda.
La mujer no tenía pulso y no respondía, así que fue trasladada a un hospital en estado crítico.
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