Ocurrió en la Ronda del Ferrocarril, en Miranda de Ebro, Burgos. Según los testimonios, el joven de 14 años caminaba con la mascarilla bajada y tras negarse a identificarse frente a la Policía, los agentes lo redujeron brutalmente contra el suelo.
El policía aplicó la técnica de la rodilla, muy polémica por ser la causante de la muerte de decenas de civiles por estrangulación, incluido el hombre afroamericano George Floyd. Según la versión de los policías, el chico discutió y forcejeó con los agentes cuando intentaron identificarlo. Concretamente, y siempre según palabras de la Policía, el menor habría intentado agredir con una cadena de perro a uno de ellos. La familia del menor niega esta versión.
Sea como fuere, la brutalidad usada contra el menor es desmesurada, además de ser muy peligrosa dado el historial del que presume esa técnica específica. Las principales críticas en las redes defienden que no es una actuación equilibrada. La familia ha anunciado que emprenderá acciones legales.
Esto no es Estados Unidos, esto pasó ayer en Miranda del Ebro. La policía reduce brutalmente a un niño de 14 años contra el suelo por llevar mal puesta la mascarilla. pic.twitter.com/SDff30E6hB
— Fonsi Loaiza (@FonsiLoaiza) September 9, 2020
