PETA Asia ha destapado un nuevo caso de crueldad animal que sufren las pitones en un matadero en Vietnam, en donde las inflan con aire comprimido hasta la muerte para suplir la demanda de pieles exóticas de la industria de la moda.
Las imágenes son durísimas. Se puede ver cómo los activistas revelan que los trabajadores anudan la boca y el ano de los reptiles con bandas de constricción apretadas. Tras esto, hacen un agujero en la cabeza o en la cola, e insertan una manguera a través de la cual meten aire comprimido hasta matar al animal.
Según Clifford Warwick, un experto en reptiles, este método es «inhumano» e «inaceptable», ya que causa un «estrés y dolor extremos» en los animales. En la investigación señalan que las serpientes, antes de ser sacrificadas, son aturdidas con una descarga eléctrica. Sin embargo, esto no sirve de nada, ya que a los minutos vuelven a la conciencia.
«Durante el proceso de sacrificio, las serpientes pueden parecer algo inmóviles, pero esto no puede interpretarse como que no sufren. La catastrófica presión interna provocada por el aire comprimido causará un dolor intenso en todo el cuerpo de la serpiente, y también provocará fuerzas de aplastamiento en su corazón y un estrés severo en sus sistemas circulatorio y nervioso», apuntó el experto.
Atención: imágenes MUY fuertes.
