El ex comisario José Manuel Villarejo ha vinculado los atentados del 17 de agosto de 2017 en Catalunya con un error de cálculo del exdirector del Centro Nacional de Inteligencia (CNI) Félix Sanz Roldán.
Villarejo ha relacionado los ataques a un «error grave» del exjefe de los servicios secretos nacionales que, según él, «calculó mal las consecuencias por darle un pequeño susto a Catalunya».
El comisario jubilado, que nunca ha ocultado su animadversión hacia Sanz Roldán, al que siempre ha responsabilizado por su situación, hizo estas declaraciones durante el segundo día de su interrogatorio en el juicio ante la Audiencia Nacional por tres piezas del caso Tándem.
«A pesar de estar jubilado yo he seguido trabajando para el CNI hasta el ultimo día, hasta el día de mi detención» (en noviembre del 2017), ha dicho el ex comisario, para luego asegurar que cuando fue arrestado hablaba con el CNI «para intentar arreglar el entuerto del famoso atentado del imán de Ripoll», cabeza de la célula que ejecutó los atentados del 17-A en las Ramblas de Barcelona y Cambrils y que, según los investigadores, falleció en la explosión de la vivienda en la que los terroristas prepararon atentar .
La presidenta del Parlament, Laura Borràs, ha exigido la apertura de una comisión de investigación en el Congreso al respecto, mientras que el portavoz de ERC, Gabriel Rufián, ha reclamado las comparecencias de Pedro Sánchez, el ministro Fernando Grande-Marlaska y Sanz Roldán.
Villarejo ya había culpado anteriormente al CNI de este atentado. El 15 de enero del pasado 2021, declaró en un juicio en el que estaba acusado de calumnias contra Sanz Roldán y aseguró que una fuente «muy importante» había alertado al CNI de un «posible riesgo» de atentado en Barcelona, pero «el CNI dijo que no era fiable» porque «había trabajado para ellos, pero en realidad era un espía marroquí».
Un año más tarde, sin embargo, Villarejo señala directamente a la intencionalidad del ex director de los servicios secretos. Según su relato de este martes, Sanz Roldán cometió «un error grave» porque «calculó mal las consecuencias para dar un pequeño susto en Catalunya».