El partido ultraderechista no entregó a Tribunal de Cuentas los datos sobre las 146 donaciones por valor de 800.000 euros que recibió por parte de un grupo de exiliados iraníes para su campaña de las elecciones europeas de 2014. Así lo indican a ‘El País’ fuentes oficiales del organismo fiscalizador.
Después de que se revelara de que el 80% de los fondos de las elecciones europeas de VOX de 2014 procedían del grupo marxista-islámico Consjeo Nacional de la Resistencia de Irán (CNRI), Abascal y su número dos Ortega Smith no tardaron en asegurar que, supuestamente, el Tribunal de Cuentas manejó y aprobó su contabilidad electoral.
«Inmediatamente presentamos toda la documentación en el Tribunal de Cuentas. La respuesta fue clara y evidente: todos los donativos habían sido legales y totalmente transparentes«, afirmó Smith el domingo pasado.
Pero la Ley 9/1985 del Régimen Electoral General dicta que solo deben presentar sus finanzas al Tribunal de Cuentas los partidos que obtienen representación, y VOX no consiguió que su candidato en 2014 Alejo Vidal-Quadras consiguiera el escaño. Sin embargo, el partido afirmó que, de forma voluntaria, aportó al órgano fiscalizador su contabilidad.
El Tribunal de Cuentas sí que auditó las cifras de las elecciones locales de mayo de 2015, donde VOX obtuvo 22 concejales y declaró unos gastos de 47.422 euros, según el fiscalizador. Aunque esta es la primera y única ocasión en la que VOX presentó sus finanzas a la institución que analiza la caja de los partidos políticos.