La pandemia del Covid-19 está obligando a la ultraderecha a reformular su xenofobia, pero se empeñan en no abandonarla. Hace unos días, Donald Trump pasaba de llamar a los migrantes indocumentados «violadores y delicuentes» a considerarlos trabajadores esenciales. Ahora, Vox pretende seguir sus pasos.
No se trata de valorar repentinamente la contribución de este sector vulnerable a la sociedad, sino de aprovechar esa misma vulnerabilidad para su explotación laboral.
La formación liderada por Santiago Abascal ha solicitado utilizar a las 6.600 trabajadoras marroquíes que llegaron a España antes del cierre de fronteras con Marruecos por la pandemia para otras tareas. Estas mujeres se encuentran en una situación delicada, ya que no pueden volver a su país de origen en estos momentos.
A través de una proposición no de ley presentada en el Congreso de los Diputados, Vox exige al Gobierno que asegure la mano de obra para la recolección de la producción existente y la realización de cualesquiera trabajos necesarios, adquiriendo el Estado, a precio de mercado, el resto de la producción para suplir las necesidades de alimentación y abastecimiento, presentes y futuras, del pueblo español.
Vox hace notar que «en ningún caso, los extranjeros afectados por estas medidas adquirirán derecho alguno adicional a los que ostentan a la fecha, ni generarán derecho alguno a obtener autorizaciones de residencia o residencia y trabajo para sí o sus familiares».
Además, el partido ultra reclama la expulsión de estas trabajadoras si rechazan la propuesta. El Gobierno debe «asegurar que, en ningún caso, esta situación extraordinaria pueda utilizarse por ellas, o sus familias, para obtener autorizaciones de residencia o residencia y trabajo en España de naturaleza permanente».
No tengo palabras. La personas #migrantes no invaden, tenemos que echarlas; pero luego, si podemos, no aprovechamos poniendo nuestras condiciones. https://t.co/igObKAa0O9
— Raquel López Merchán (@Chachelmerchan) May 4, 2020
Y un partido que quiere aprovecharse de los temporeros marroquíes que se han quedado encerrados en españa para recoger las cosechas, aunque tuvieran otros contratos. Y si no se acepta la «propuesta» te echan, claro.https://t.co/w6yeHWioGH
— дяcoиada ? (@miguelarman) May 4, 2020