El asesinato de Beatriz a manos de su pareja ayer en Valencia ha provocado que se repita una escena que, tristemente, hemos vivido ya 999 veces desde 2003: el minuto de silencio.
Se hizo al mediodía en la puerta de las Cortes Valencianas, y aún siendo la primera vez que se hace con VOX formando parte de los diputados presentes, la ultraderecha quiso marcar distancias. Lejos de mostrar su respeto por la víctima junto al resto de integrantes y tras la pancarta de «Las Cortes contra la violencia machista», VOX optó por hacerlo en solitario y apartado.
¿La razón? su negativa a calificar estos asesinatos como violencia machista. «El grupo parlamentario de VOX en las Cortes Valencianas ha participado esta mañana en el minuto de silencio por la última mujer asesinada
porque VOX está siempre al lado de las víctimas, sean del sexo que sean: mujer, hombre, niño o anciano», aclaró la agrupación en un comunicado. «Por ello en Vox preferimos hablar de violencia intrafamiliar y no de la mal llamada ‘violencia de género’. Todos son víctimas y merecen nuestro apoyo», concluyeron.