La examante del rey Corinna Larsen, y el excomisario José Manuel Villarejo, generaron una estrechísima relación donde la mujer le iba contando algunos secretos de la corona que su interlocutor grababa para archivar y guardar en caso de verse en aprietos algún día.
En un nuevo capítulo de estas conversaciones que van cayendo con cuentagotas, elDiario.es cuenta cómo Corinna le aseguró a Villarejo que le dieron medicamentos a Juan Carlos I con el propósito de mantenerlo controlado.
Aunque no se dan nombres explícitos, sitúan al entorno formado por el entonces director del CNI, Féliz Sanz Roldán, o la familia Franjul como los que le suministraban distintos medicamentos para rebajar su nivel de líbido.
Las conversaciones hablan cómo le suministraron hormonas femeninas «para quitarle la fuerza. Para quitarle la testosterona y todo eso. Le han quitado todo, ni podía estar con una mujer ni nada, le han puesto el cierro». Además, hablan de que Juan Carlos I entró en «una depresión horrible» con este ‘tratamiento’, y se deja entrever que así era «mejor manipular a la persona», algo que tanto Corinna como Villarejo califican de «muy miserable, maquiavélico y sucio».
