EH Bildu ha propuesto que se aplique en las máquinas tragaperras y de apuestas que hay en bares y restaurantes un sistema de bloqueo como el utilizado en las máquinas de tabaco, para impedir que los menores de edad puedan usarlas. Es decir, que sean los camareros los que puedan activar y desactivar estas máquinas.
El objetivo de estas propuestas es frenar el riesgo de ludopatía por parte de los jóvenes ante el alarmante crecimiento de estas industrias. Según datos del Gobierno Vasco, el número de vascos que han hecho apuestas deportivas se ha multiplicado por 8’5 desde 2012 a 2017, y actualmente 10.500 personas se encuentran en situación de riesgo por su relación con estas apuestas.
Además, EH Bildu también pide al Gobierno Vasco que realice, en un plazo de seis meses, un estudio en profundidad sobre las apuestas y juegos de azar que puedan crear adicción, analizando su evolución, el perfil de los consumidores o la población, prestando especial atención a los jóvenes y menores de edad.
Tras este estudio, piden que medidas correctoras en el Plan de Adicciones y una campaña de concienciación sobre los peligros del juego y de las apuestas, principalmente en centros educativos.
