El día de San Isidro se llevó a cabo la inauguración de un pebetero en Madrid, en la calle Alcalá, justo frente al Palacio de Cibeles, en memoria de las víctimas del coronavirus.
El monumento fue inaugurado en la mañana del viernes por el alcalde José Luis Martínez-Almeida y la vicealcaldesa Begoña Villacís. De hecho, su encendido fue el primero de los pocos actos celebrados este año en San Isidro.
Pero el pebetero, en principio diseñado para que la llama sea permanente, se quedó sin gas en la tarde del sábado. Así, estuvo sin funcionar hasta que varios operarios se acercaron a resolver el problema y cambiar la bombona de butano vacía por otra.
La pieza fue diseñada por Carlos Rubio, y tiene una placa en la que puede leerse: «vuestra llama nunca se apagará en nuestro corazón. En homenaje a los fallecidos durante la pandemia del COVID-19».
Ayer, Almeida y Villacis, inauguraron el pebetero en memoria de las víctimas del COVID-19.
Hoy Pepe Gotera y Otilio estaban con las bombonas de butano que hay que cambiar cada 3 horas. Era el momento del cambio y así he tomado las fotos. Prisas por hacerse la foto. De vergüenza. pic.twitter.com/ffvsplRLB0— MuchaMerche (@muchamerche) May 17, 2020