El Tribunal Cuentas ha detectado que el partido de extrema derecha Vox gastó un total de 158.000 euros no subvencionables en las elecciones generales del 28 de abril. Se trata del primer examen de este órgano fiscalizador al que son sometidas las cuentas del partido de Santiago Abascal.
Las elecciones del 28A hicieron que Vox saltara a la política nacional, ya que la formación consiguió representación en las Cortes Generales, con 24 diputados en el Congreso. Por esto, sus cuentas deben ser revisadas para poder acceder a las subvenciones electorales que contempla la Ley de Régimen Electoral General (LOREG).
Vox declaró haber gastado en estos comicios alrededor de un millón de euros, de los cuales el Tribunal de Cuentas califica de gastos «irregulares» 158.108,58.
De estos gastos que no pueden ser subvencionados, 112.488,95 euros se destinaron a conceptos no considerados como gasto electoral; 2.982,65 euros se gastaron fuera del periodo establecido y otros 42.636,98 euros fueron gastos de publicidad en prensa, radio u otros medios digitales antes del comienzo de la campaña electoral, lo que no está autorizado por la Loreg.
Asimismo, Vox reporta haber gastado cerca de 840.000 euros en el envío de propaganda electoral, de los que el Tribunal excluye de ser subvencionados 870 euros por no cumplir con los requisitos.
Los partidos políticos deben abrir una cuenta específica para gestionar sus gastos e ingresos de cara a los procesos electorales. Vox cumplió con esta condición para las elecciones del 28A, según registra el Tribunal de Cuentas, pero hizo pagos por un importe total de 4.000 euros con cargo a otra cuenta. También gastó 3.180 euros de la cuenta del 28A una vez pasados los comicios, algo que no está permitido.
El Tribunal de Cuentas también refleja que Vox declaró 20.000 euros en viajes hechos por las elecciones generales en la contabilidad de los comicios al Parlamento Europeo de un mes después.
En estas elecciones europeas, Vox declara gastos ordinarios por un total de 247.000 euros. Igual que en las del 28A, el Tribunal de Cuentas considera no subvencionables una serie de gastos que no cumplen las condiciones, en este caso por un valor de 52.600 euros.
De ellos, cerca de 33.000 son gastos que el órgano fiscalizador no considera de naturaleza electoral, mientras que los 19.725,42 euros restantes tienen una «justificación insuficiente».
Respecto a la propaganda electoral, en estos comicios Vox declara un gasto por un valor de 200.000 euros, de los que el Tribunal de Cuentas excluye 54.764,87 euros como financiables con subvenciones electorales.