Jacinda Ardern, del partido Laborista, ha conseguido una ventaja aplastante en las elecciones nacionales tras la concesión de la derrota proclamada por su rival del Partido Nacional, Judith Collins.
Con un 80% de votos escrutados, el Partido Laborista se ha hecho con el 49% de las papeletas, su mejor resultado en casi un siglo y más de 20 puntos por delante del Partido Nacional, que ha caído en su peor resultado 27%.
Hasta el momento, Ardern tiene la mayoría absoluta en el Parlamento al traducirse a 64 escaños, tres más de los necesarios para hacerse con el dominio de la cámara de 120 diputados a falta aún de saberse el 20% del escrutinio. El resto de partidos no alcanzan los dobles dígitos. El liberal ACT Nueva Zelanda ha registrado un 8,1% de las papeletas, y los Verdes apenas un 7,5% del apoyo.