Cuando alguien dice «no soy homófobo, pero…» ya sabemos lo que va a venir después. Pero si te dice «no soy omofogo, pero…» será mejor que corras, lo que viene a continuación puede llevar tu estrés a niveles inimaginables.
«Mi novia y yo estamos buscando piso en Madrid. Esta ha sido la contestación de un «no homófobo», ha escrito la usuaria de Twitter Pepa López acompañando una captura de la conversación entre el casero y ella.
El hombre pregunta de dónde es la pareja. «Es mi novia, tenemos ambas 30 años, ella es española. Yo francesa», contestó Pepa. Al hombre (no homófobo) le chirrió. «Emmm». «Tengo un niño en casa. No soy omofogo pero no quiero que mi hijo vea eso. Lo siento», terminó por responder.
La conversación acumula ya más de 8.000 retuits y 16.000 likes, y ha ocasionado que hasta 9.900 comentaran lo ocurrido.
Esta es la segunda vez en menos de un mes
— Pepa (@pepalopezart) December 2, 2018
Que no le estamos entendiendo, que no es un maldito homófobo, que es Wellington y no quiere ver a franceses y españoles juntos, que a estas edades ya no está para esos trotes
— Q_uiop (@Q_Uiop) 3 de diciembre de 2018
A nosotras nos hicieron lo mismo en Barcelona. El argumento: «La propietaria prefiere a una pareja normal». Ánimos ?
— Alba Laguna (@albalaguna81) 3 de diciembre de 2018
Pues mejor que vende los ojos y tape los oídos a su hijo… Porque afortunadamente en Madrid las parejas omoguexuales no ocultan su amor en público… 😉
— JJ (@jjgo88) 3 de diciembre de 2018
Homófobo no pero analfabeto lo es un rato.
— ????? (@David_dhi) 3 de diciembre de 2018
No se que es peor si su intolerancia o su incultura, animo chicas. Yo porque no vivo en Madrid, que sino ya tendriais piso y sin tanto rollo. Mucho animo
— Jonny ?|TAHI|??? ??? (@Txonny_) 3 de diciembre de 2018
Pobre criatura, las aberraciones que si tendrá que ver cuándo lea a su padre
— soypersona (@CathyAsl) 2 de diciembre de 2018
Le ha faltado el «no soy homófobo, boyera de mierda»
— Jose Román (@elsuzio) 3 de diciembre de 2018
Creo que a ese tipo de personas se les conoce como “gilipollas”
— Arpire_18 (@Arpire18) 3 de diciembre de 2018
Pues mis hijos están creciendo viendo «eso», aprendiendo a respetar a todo el mundo, a no juzgar y a que de mayores, sientan lo que sientan estará bien.
— la ciborg (@androideloca) 3 de diciembre de 2018