Dolores Agra lleva 64 años trabajando (y cotizando) en una mercería de A Coruña. Comenzó a los 14 años, ganando menos de un euro, 150 pesetas. Ahora, con 78 años, está a punto de jubilarse y es la mujer que más años lleva cotizados en España.
No obstante, su pensión no llega a los 1.000 euros. «Yo contaba con que me quedaría más, pero no», se lamenta Agra. La razón es que para el cálculo de la pensión solo se tienen en cuenta los últimos 19 años cotizados.