Durante el último mes han ido apareciendo en diferentes ciudades miles de banderas de España, supuestamente como homenaje a las víctimas de la pandemia, aunque con un objetivo bastante más partidista y retorcido. Primero fue Madrid, luego Valencia, Sevilla y Murcia.
La responsable es la Asociación de Víctimas y Afectados por Coronavirus (ANVAC), una organización vinculada al partido de extrema derecha Vox. Cada bandera representa a un fallecido por la nueva enfermedad, pero en lugar de las 34.000 víctimas mortales de las que informa Sanidad, añaden varios miles de ellas para acusar al Gobierno de ocultar cifras.
La localidad más reciente elegida por los ultras es Toledo, donde pretendían colocar 65.000 banderas, pero la Policía Local ha impedido esta acción, según ha denunciado la asociación.