Recientemente se hablaba de los efectos de la cuarentena por coronavirus en Venecia, donde tras la detención de las actividades humanas los canales se volvieron transparentes y se podían ver peces y hasta cisnes.
Un efecto similar ha tenido la cuarentena en España. Concretamente en las ciudades de Madrid y Barcelona, donde el dióxido de nitrógeno ha bajado «a mínimos históricos», según Greenpeace.
El pasado el martes 17 el nivel medio de dióxido de nitrógeno registrado en las estaciones madrileñas fue un 75% inferior al del martes de la semana anterior. En Barcelona, esta reducción superó el 45%.
Adrián Fernández, responsable de la campaña de Movilidad de Greenpeace, ha explicado que las medidas de confinamiento han coincidido con una borrasca que ha contribuido a mejorar la calidad del aire, aunque la reducción del tráfico ha tenido una clara incidencia tras haber caído «alrededor de un 60%».
“Es absolutamente lógico que se reduzca la contaminación”, asegura Xavier Querol, investigador del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC). “Los domingos hay menos contaminación de media porque hay menos industria y tráfico, y ahora estamos con menos tráfico e industria”. No obstante, Querol recuerda que “la lucha contra la contaminación es una carrera de fondo y no de sprints”.
Querido diario: Es la primera vez en mi vida que veo Madrid sin contaminación atmosférica. pic.twitter.com/H9CA7qCgwk
— EL CUCOFAITOR (@CucuFaiter) March 17, 2020
Tiene bemoles que tenga que venir un virus a limpiar Madrid de contaminación porque Martínez y la IDA no quieren hacerlo. pic.twitter.com/AohuQ95B3d
— Nieves Concostrina (@NConcostrina) March 11, 2020
Madrid desde Getafe se ve precioso sin contaminación #MadridDesdeElBalcon pic.twitter.com/wihvXfRmr0
— Sonia de las Heras (@soniadelasheras) March 17, 2020