Cuando comenzaba el pico de la pandemia a mediados de marzo y abril, la Comunidad de Madrid repartió unas directrices para excluir a las personas mayores que estaban viviendo en residencias o en sus casas de atención médica primaria.
Ahora, se desvela que los mayores que contaban con un seguro privado sí fueron trasladados a hospitales, no encontrándose ningún problema para ser atendidos en los centros hospitales.
Así lo informa El País, donde cuentan cómo trabajadores de la red privada y sus clientes aseguran esta práctica por parte del Gobierno de la Comunidad de Madrid, dirigido por Isabel Díaz Ayuso. Ninguna de las 40 clínicas y hospitales privados de Madrid recibieron instrucciones de exclusión como las que sí recibieron los públicos, donde se pedía no atender a mayores de residencias que estuvieran en fase terminal y con dependencias en la movilidad.
El Gobierno de Madrid también distribuyó un protocolo a los médicos de los centros de salud que atienden a domicilio en los que también se excluían de atención médica a los pacientes de «más de 80 años y enfermedad de órgano terminal y/o CFS igual o mayor que 5; tener demencia moderada o grave; fragilidad clínica de 8-9; padecer cáncer terminal, o tener una expectativa de vida inferior a un año».
Aseguradoras como Asisa, Sanitas o QuirónSalud han confirmado al medio antes citado que no recibieron ninguna orden de exclusión de mayores por parte de la Consejería de Sanidad. La hija de una residente en un centro cuenta cómo ella llamó a Sanitas para que recogieran a su madre. La ambulancia no tardó más de una hora y, tras pasar un mes hospitalizada con neumonía bilateral, se encuentra completamente recuperada.
