Lorena Morales, portavoz de Mujer del PSOE en la Asamblea, ha denunciado ante la SER que la Comunidad de Madrid «está asfixiando» a las clínicas privadas acreditadas para la Interrupción Voluntaria del Embarazo «porque les debe cuatro meses», acumulando un millón de euros de deudas.
«Trabaja con ellas y sin convenio y sin contrato, lo que supone una gran inseguridad para las propias usuarias», asegura Morales, refiriéndose así a que tan solo 2 de los 14.254 abortos realizados en la región en 2020 fueron en hospitales públicos.
Morales, además, denunció que el procedimiento por el que se trasladan los restos biológicos de los abortos es en coches fúnebres: «En lugar de mandar un vehículo de la consejería de Sanidad, envían una funeraria con un ataúd para adultos, lo que genera gran alarma y envía un mensaje ideológico durísimo».
Varias de las clínicas implicadas han confirmado a la SER que esto siempre ha ocurrido en Madrid y que es una práctica marcada pro el protocolo de sanidad mortuoria, aunque es Madrid la única región que procede de esta manera con los restos orgánicos. Aseguran además que estas imágenes después se utilizan en las campañas en redes sociales de los grupos antiabortistas.
