Portugal se adelanta diez pasos al resto. La Comisión Europea ha dado vía libre este martes a la creación del Banco Portugués de Fomento, que será propiedad del Estado y dispondrá de un capital de 255 millones de euros.
Las actividades llevadas a cabo por este banco se centrarán en los fallos del mercado en préstamos, mercados de capitales, y en mejorar el acceso a la financiación de proyectos de investigación e innovación, infraestructuras sostenibles, inversión social y diferentes factores que aumentan la competitividad de las empresas nacionales y las inversiones del sector público.
Por su parte, la Comisión Europea llegó a la conclusión de que la creación de este banco es «una solución adecuada y proporcionada para dar financiación adicional a empresas y proyectos que, de lo contrario, seguirían sin financiación debido a fallas del mercado».
Este nuevo banco tiene como objetivo ser un verdadero banco de promoción del desarrollo y gestionará un fondo de capitalización de empresas.
