El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha comparecido este martes tras la reunión del Consejo de Ministros, donde se ha pronunciado por primera vez sobre la marcha del rey emérito Juan Carlos I a la República Dominicana en medio de los escándalos sobre sus presuntas corruptelas.
Sánchez ha vuelto a defender a la monarquía, trasladando el «absoluto respeto» del Gobierno a la decisión de la Casa Real porque el «distanciamiento» de conductas no ejemplares.
«No se juzga a instituciones, se juzga a personas. Don Juan Carlos ha dicho que está a disposición de la justicia, si fuera necesario, como cualquier otro español», ha defendido el presidente. «La respuesta (a los escándalos) ha sido la de una democracia vigorosa», añadió.
El jefe del Ejecutivo ha considerado que el país necesita «estabilidad»: «La línea marcada por la Casa Real es, a mi juicio, la adecuada», ha dicho acerca del comunicado emitido este lunes.
Asimismo, Sánchez ha asegurado no conocer el paradero actual del emérito y ha hecho hincapié en que su Gobierno está comprometido con el pacto constitucional, cimentado sobre la monarquía parlamentaria.
