El caso Julen, el niño de dos años que cayó a un pozo en Totalán (Málaga), se cerrará este martes finalmente con un acuerdo entre los padres del menor y el dueño de la finca, David Serrano.
La defensa de Serrano, acusado de homicidio imprudente grave, ha firmado un acuerdo con Vicky y José, los padres de Julen, a tan solo 24 horas del juicio. En él, el propietario acepta pagar una indemnización de 180.000 euros a los padres y una condena de prisión de entre seis meses y un año (el mínimo ante la ley).
Mañana martes lo presentarán ante la magistrada del Juzgado de lo Penal número 9 de Málaga, quien será la encargada de dar el visto bueno final y terminar así el proceso legal.
Serrano no tiene antecedentes penales, lo que podría suponer que se libre de la prisión. Respecto a la indemnización, el acusado ya ha pagado 25.000 euros. El resto lo abonará mediante 50 euros mensuales hasta que mejore su situación económica, ya que se encuentra desempleado.