Un joven argentino se hizo un tatuaje, se arrepintió y se lo quitó de una manera que ha chocado a las redes.
El joven utilizó un rallador de queso para dejarse la piel en carne viva y eliminar el dibujo. Un amigo suyo compartió la historia ilustrada con fotos del (sangriento) proceso.
El medio ‘Infobae’ contactó con el joven, quien explicó el motivo: «Me hice el tatuaje y a la semana quise inscribirme para ingresar en la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA). Si bien en los requisitos de la web no aparece, me comentaron que no podía trabajar con tatuajes visibles. Esto ocurrió en agosto de 2017. En ese momento tenía 19 años».
Sobre el proceso, ha explicado que «dolió y sangró muchísimo. Tenía que vendármelo constantemente y colocarle desinfectante y antiséptico. A la semana fui a un hospital y me dieron la vacuna antitetánica. No se lo recomiendo a nadie».
Un amigo se tatuó y como no le gusto el tatuaje se lo saco con un rayador de queso. Si un rayador de queso pic.twitter.com/1tHObPVvaq
— Matías (@_Matycosta) 1 de octubre de 2019
Psiquiatra urgente
— agustin (@haganungol) 1 de octubre de 2019
Pasó de estar rayado a estar rallado xd
— nikito del cap (@NicoCastro_9) 1 de octubre de 2019
Noo mann, seguro después se lo pusiste a los fideos y te lo comiste
— Leean? (@leeancito) 1 de octubre de 2019
— ꜰʀᴀɴᴄᴏ (@Francoagustin6) 1 de octubre de 2019