Siete denuncias por abusos sexuales a menores de entre 11 y 13 años no han sido suficientes para quitar del cargo a un profesor de la academia Roda de Berà, en Tarragona, a quien el Juzgado de Instrucción Nº9 de El Vendrell ha decidido no apartarlo por ser una medida demasiado «restrictiva».
Las denuncias van desde 2017 hasta mayo de este mismo año. Los padres de la última víctima denunciaron ante las autoridades que su hija había sufrido tocamientos por parte del profesor de la academia de refuerzo a la que acudía.
Los Mossos detuvieron al hombre que poco después fue puesto en libertad, pero las autoridades se percataron de que el anterior mes de abril habían impuesto otra denuncia similar, así que alertaron al fiscal y al juez. Sin embargo, para el magistrado los indicios de delito son «débiles» porque aún no se ha pronunciado la menor y «no existe en la actualidad una situación objetiva de riesgo para la vida, integridad o libertad sexual de la menor».
Los padres de la niña pidieron prisión incondicional, pero el juez se limitó a exigirle la presentación de dos días al mes en el Juzgado y la retirada del pasaporte, pero descartó apartarlo de su profesión.
«En cuanto a la restricción de ejercer alguna función de docencia o cualquier otro tipo de trabajo respecto a menores, el Ministerio Fiscal se opone a la misma por ser demasiado restrictiva para el investigado, sin prejuicio de que pueda acordar en función de como vaya la investigación», dicta el informe.
