Este jueves, la diputada del partido de ultraderecha Vox en Madrid Alicia Rubio ha pronunciado unas declaraciones completamente surrealistas en la Asamblea madrileña, en la que se debatía una Proposición No de Ley (PNL) presentada por Unidas Podemos para instar al Gobierno de Isabel Díaz Ayuso a cumplir de manera íntegra la ley contra la LGTBIfobia aprobada en 2016.
La diputada de Unidas Podemos Paloma García Villa contó que «la primera vez que me llamaron tortillera de mierda era tan pequeña que no sabía ni lo que significaba. Usted imagínese crecer en un mundo donde parte de la sociedad te dice que tú eres un error, que lo que eres está mal».
Rubio, que difundió en su momento el bulo de que las vacunas provocan imantación, respondió que las reivindicaciones del colectivo LGTBI son «inacabables» y que no son más que «una casta LGTBI, como en el medievo con la nobleza, que impide el derecho fundamental y universal a la igualdad entre la casta privilegiada y el resto».
Rubio afirmó que Samuel Luiz, el joven apaleado hasta la muerte entre gritos de ‘maricón’, «fue asesinado por extremistas de izquierda sectaria por pura violencia, al margen de su condición sexual».
La ultra también dijo que los miembros de la izquierda «viven en el mundo de Yupi, empeñados en la revolución pornomarxista con el dinero de otros».
El presidente del Grupo Parlamentario de Más Madrid, Eduardo Rubiño, contestó de manera contundente: «La señora Alicia Rubio, de Vox, ha dicho que la España de la que hablaba mi compañera Paloma ya no existe. Esa España que dice que no existe es en la que una manada homófoba ha matado a golpes a Samuel«.
La impecable respuesta de Eduardo F. Rubiño (Más Madrid) a Alicia Rubio (Vox), que acusa al colectivo LGTBI de hacer "la revolución pornomarxista".https://t.co/ofuR0UfQSB pic.twitter.com/RuGhaad6aL
— Público (@publico_es) July 15, 2021
