En una conversación entre el excomisario José Manuel Villarejo y la exsecretaria del PP, María Dolores de Cospedal, esta pidió al policía que «no delatase a nadie», a lo que este le respondió: «¿cómo que no? Os busco la ruina a todos, y al primero al barbas», en referencia a Mariano Rajoy.
Esta amenaza, según Villarejo, fue clave para que los responsables de Interior no tomaran represalias contra él por haber investigado a Ignacio González, para entonces presidente de la Comunidad de Madrid.
Esta conversación se la relató el propio excomisario a su amigo Enrique García Castaño el 17 de febrero de 2017, según el documento de la Fiscalía Anticorrupción en la Audiencia Nacional, donde se recogen los principales indicios existentes contra los implicados en la operación Kitchen.
En esta pieza del caso Tándem se investiga el plan orquestado por dirigentes del PP como Cospedal y altos cargos de Interior como el exministro Jorge Fernández Díaz para robar la información que disponía Luis Bárcenas, extesorero del PP, que comprometía la financiación del partido. Villarejo y García Castaño captaron al chófer de los Bárcenas, Sergio Ríos, para que realizara esta misión y fue recompensado por ello con fondos reservados.
Este fragmento de la conversación pertenece a unos mensajes entre Villarejo y Castaño, donde el propio excomisario le recomienda hacer lo que él hizo «en el 2012, cuando el tema de Ignacio González». «Me dijo Cosidó: ‘me das la información y no se qué’, y lo mandé a cagar, le dije a Pino: ‘trasmítele que le monto un chocho a todos que se cagan’. Me llamó la Cospe: ‘joder, no delates a nadie’. ¿Cómo que no? Os busco la ruina a todos, al primero al «barbas», a tomar por culo».
