Angelos Tsiaras, atrónomo del University College de Londres y líder del equipo de investigación, declaró ayer en una rueda de prensa que, por primera vez, han encontrado agua en la atmósfera de un planeta muy potencialmente habitable.
Se llama K2-18 b, y tiene una superficie probablemente rocosa y una temperatura compatible con la vida. Según observaciones realizadas con el telescopio Hubble, el planeta contiene agua en su atmósfera. «Es el mejor candidato a exoplaneta habitable que tenemos ahora», declaró Tsiaras.
Está situado a 110 años luz de la Tierra en la constelación de Leo, y es un tipo de planeta conocido como supertierra, lo que quiere decir que es un mundo mucho más grande que el nuestro, pero a su vez, lo bastante pequeño para tener una superficie con continentes y océanos. Con el doble de diámetro que la Tierra, tiene una masa ocho veces mayor, así que caminar por allí nos resultaría algo difícil debido a la gravedad.
Según los datos presentados por el equipo de investigación, se detectó una señal inequívoca de vapor de agua, hidrógeno y helio, con la posibilidad de que también haya nitrógeno y metano. Todos presentes en la atmósfera de la Tierra.
La investigación va dirigida, más que a si el planeta puede ser habitado por humanos o no, en si existe la posibilidad de nuevas formas de vida (parecidas a las terrestres) que hayan evolucionado allí de manera muy diferente a la nuestra. «No sería un destino ideal de vacaciones, todos tendríamos cáncer por la radiación», explica.