Varios cirujanos del hospital barcelonés Vall d’Hebron han conseguido operar un cáncer de páncreas avanzado, el tipo de cáncer más mortal y que hasta ahora no se podía operar. Lo han hecho con una nueva técnica pionera en la que una aguja pincha el tumor y, mediante calor, abrasa y destruye las células.
La técnica aún forma parte de un ensayo clínico, y ya han operado a tres pacientes que sufrían este cáncer, un adenocarcinoma de páncreas localmente avanzado, imposible de operar con técnicas tradicionales, y para el que hasta ahora el único tratamiento era la quimioterapia paliativa.
«Este estudio va a demostrar si hay realmente beneficio con esta técnica en comparación con la quimioterapia» decía Elisabeth Pando, doctora del Servicio de Cirugía Hepatobiliopancreática y Trasplantes e investigadora del grupo de Trasplantes Digestivos del Vall d’Hebron Instituto de Investigación.
Este hospital es el único centro español que forma parte de este estudio, llamado PELICAN, liderado por expertos del Academic Medical Center de los Países Bajos, y en el que participan también 18 hospitales europeos.
La doctora ha apuntado que los criterios de inclusión para el estudio son muy estrictos, aunque esperan que en el futuro no lo sean tanto. Entre los que cumplían los requisitos, han seleccionado a tres pacientes aleatoriamente. Una de las pacientes fue María José, médico de familia, que fue diagnosticada con este tipo de cáncer en abril. «Sabía que la supervivencia al cáncer de páncreas es pequeña», y se daba a sí misma «unos seis meses» de vida. Sin embargo, tras la operación, en agosto, asegura que se siente «muy bien».
Los resultados del estudio se publicarán en 2021, aunque en el Vall d’Hebron concluirá el año que viene.