El voto en contra del PP y la abstención de Vox en la Asamblea de Madrid han conseguido impedir la creación de la Ley contra el Fraude y la Corrupción, propuesta por Más Madrid.
La iniciativa, que sí ha sido apoyada por PSOE y Unidas Podemos, tenía como objetivo crear una agencia antifraude independiente, así como ofrecer asesoramiento legal y psicológico gratuito y proteger al denunciante ante presiones de sus superiores.
Esta entidad independiente tendría como meta vigilar el cumplimiento del estatuto del denunciante, protegiendo su anonimato. Además, Más Madrid planteaba que el nombramiento de su responsable se realizase a través de una votación en la Asamblea de una terna presentada por asociaciones civiles vinculadas a la lucha contra el fraude y a favor de la transparencia.
El diputado de Más Madrid Alberto Oliver ha afirmado que esta normativa quiere acabar con el acoso laboral “a aquellos que denuncian la corrupción y les aíslen”. “Cuando denuncias aunque ganes ya has perdido porque muchos se piden una excedencia a los pocos meses cogiendo el primer trabajo que pueden pensando en ganar el juicio. Cuando lo ganan, empieza la pesadilla porque empiezan a recibir querellas, muchas a instancias de instituciones”, ha explicado.
Por otro lado, el diputado del PP Ignacio Catalá ha asegurado estar abochornado ante esta normativa “inconsistente” que podría ser “inconstitucional” con varios artículos “ilegales”. “Carece de todo el sentido. Tratan de manchar el buen nombre del PP”, le ha reprochado a Más Madrid, a los que ha exigido que añadan a su partido a juristas y a funcionarios para que les impidan presentar “estas vergüenzas y estas ocurrencias”.
En cuanto a la ultraderecha, la diputada de Vox Ana Cuartero ha dicho que su partido no se opone a la creación de agencias autonómicas contra la corrupción mientras que se tramite una Ley nacional, sobre la que deberían delegarse las competencias.
Cuartero ha añadido que es “imprescindible” que los denunciantes se sientan arropados y que dispongan “de todos los derechos”. Por ello, ha dejado en manos del PP la decisión de su aprobación para ver “hasta dónde llega su compromiso contra la corrupción”.