Si ayer nos sorprendíamos con que una política tropezara tres veces con la misma piedra, imaginaos una cuarta. Sí, Noelia Posse, alcaldesa de Móstoles por el PSOE, maestra de los favores a sus cercanos, ha vuelto al foco de atención (si es que ha dejado de serlo en algún momento). Esta vez, con un plus de 800€ mensuales para su ex.
Su nombre es Gonzalo Sánchez Oliva, y es la expareja de Posse, quien lo ha colocado como supervisor del Grupo de Intervención Especial del Ayuntamiento. Un grupo creado bajo la legislatura de Posee.
La asignación a este grupo le supone a Oliva, que lleva desde el año 2001 como personal laboral del Ayuntamiento de Móstoles, un complemento salarial de 800 euros al mes. Este movimiento estaba incluida en el mismo decreto por el que la alcaldesa decidió ascender a su tío como director técnico, con un complemento de 1600 euros al mes, para más tarde renunciar al ascenso debido a la polémica generada.
Tras cuatro dimisiones (su hermana, su tío, su amiga de la infancia y un director municipal), Posse se muestra cabreada con ella misma por los errores que admite haber cometido. Según sus palabras a la Cadena SER, no cree que haya más casos: «Hemos mirado uno a uno al detalle para que no vuelva a suceder lo que ha sucedido. En algunos casos yo desconocía esos hechos».
Por su parte, su socio de Gobierno le ha dado 48 horas al PSOE para que la destituya. El líder de Más Madrid Ganar Móstoles, Gabriel Ortega, ha pedido que se tomen medidas. «No podemos asumir esta situación en un gobierno progresista que tiene la obligación de ser ejemplar».
