Se llama Tikiri. Es una hembra de elefante de 70 años. Su profesión, obligada, es la de entretener a miles de personas en la fiesta del Kandy Escala, en Kandry, una fiesta budista celebrada en la ciudad asiática en verano.
La Fundación Save Elephant ha denunciado que Tikiri es una elefanta anciana y enferma a la que sus dueños le obligan a trabajar durante horas en esta celebración, característica por lo colorido, lleno de luces y por sus elefantes disfrazados: de esta forma jamás queda a la luz sus esqueléticos y enfermos cuerpos.
https://www.facebook.com/SaveElephantFoundation/posts/2361434793925283
A su vez, la organización denuncia que otros 60 elefantes han sido obligados a trabajar durante diez noches consecutivas hasta altas horas de la madrugada en unas fiestas donde predominan el ruido, el humo, las luces y los fuegos artificiales.
“Nadie ve su cuerpo huesudo o su condición debilitada, debido a su disfraz. Nadie ve las lágrimas en sus ojos, heridos por las luces brillantes que decoran su máscara; nadie ve su dificultad para caminar, ya que sus piernas están encadenadas mientras camina«, declaran en las redes.
La fundación ha propuesta la recogida de firmas para conseguir medidas que regularicen esta situación, llevando 4.000 inscritos al momento.
