La Guardia Civil procedía ayer al arresto de nueve miembros de los Comitès de Defensa de la República (CDR) acusándolos de terrorismo, rebelión y tenencia de explosivos. La Fiscalía, además, aseguraba de «la certeza de que las acciones se iban a producir en el periodo comprendido entre el aniversario del referéndum ilegal independentista del 1-O de 2017 y el anuncio de la sentencia del juicio del procés«.
Las detenciones se produjeron en el marco de una investigación de un año de duración, donde las autoridades recabaron información a través de conversaciones telefónicas intervenidas entre los detenidos y, sobre todo, después de que en febrero llenaran la carretera de aceite para dificultar la llegada de los presos.
Según fuentes de esta investigación, hay conversaciones intervenidas que «acreditarían su relación con grupos anarquistas de fuera de España, que podrían haberles proporcionado la formación necesaria para fabricar artefactos caseros».
En los registros realizados, los agentes encontraron elementos del compuesto termita, nitrato de amonio, óxido de hierro y acetona. Los investigadores lo relacionaron directamente con la elaboración de explosivos, pero también sirven para la elaboración de fuegos artificiales. De hecho, el sótano registrado es un espacio donde se guarda el material pirotécnico de las fiestas de la localidad, que acabaron el 9 de septiembre. Así mismo, los agentes incautaron una urna presuntamente utilizada en el referéndum del 1-O.
El Comité de Fiestas de Sabadell ha asegurado que «el local es propiedad de la familia de uno de los detenidos, que participa activamente en la actividad de diversas entidades de la ciudad y que utiliza el almacén para guardar elementos de los grupos«.
Varios medios difundieron la noticia de que los detenidos estaban elaborando Goma 2 casera, amonal o amosal. La Guardia Civil ha descartado por completo esto.