Asuntos internos de los Mossos d’Esquadra ha podido desmantelar una organización mafiosa dentro del cuerpo policial y ha señalado a tres agentes de Santa Coloma de Farners, Girona, como cabezas de la operación.
Estos tres agentes robaban, cultivaban y traficaban con drogas, además de permitir a varios traficantes asociados la venta de drogas y facilitarles información policial reservada para que pudieran actuar con impunidad durante años.
Los agentes detenidos robaban grandes cantidades de droga decomisada y la entregaban a traficantes a cambio de dinero, protegían a miembros de las mafias y falsificaban atestados para camuflar la droga decomisada que robaban.
La investigación comenzó cuando uno de los traficantes asociados confesó la trama en una comisaría. Allí desmanteló los pagos que hacían, entre 600 y 1.500 euros cada quince días, y la cantidad de cocaína, marihuana y hachís procedentes de almacenes de la policía que el traficante vendió.
Los agentes se cobraban además el 50% de los beneficios de estas ventas ilegales, llegando el delator a entregar más de 30.000 euros al jefe de los tres agentes. Con la investigación se ha podido demostrar que los agentes desviaron a principios de este mismo año una camioneta cargada con 160 kilos de cocaína que los Mossos interceptaron. Con escuchas y seguimientos se pudieron acreditar los hechos denunciados.
De momento, los abogados de los Mossos han pedido la nulidad de las actuaciones ya que el traficante no ha sido imputado aún por los hechos.
