Agitación e incomodidad en el Parlamento irlandés al sacar la diputada Ruth Coppinger un tanga en mitad de la sesión. «Cómo creen que se siente una víctima de violación ante la incongruencia de que su ropa interior sea mostrada en un tribunal?» inquiere la diputada.
Coppinger hacía referencia al juicio de una chica de 17 años que acusó de violación a un hombre de 27. La chica perdió el juicio porque en el momento de la violación llevaba un tanga de encaje. La abogada de la defensa argumentó que al llevar esta prenda consentía el sexo. Al jurado le debió parecer un argumento razonable, ya que absolvió al acusado.
La sentencia ha sumido a Irlanda en la indignación y ha dado lugar a manifestaciones y protestas. El primer ministro, Leo Varadkar, se sumaba a la denuncia. Le parecía que «cualquier defensa en esa línea era reprobable». En las redes se ha difundido la polémica con el hashtag #estonoesconsentimiento (#thisisnotconsent), con el que mujeres de todo el mundo están publicando fotografías de sus tangas.
https://twitter.com/dadatina/status/1062805330361487361
En Irlanda un violador fue absuelto por la justicia, al usar la ropa interior de una adolescente como prueba de que ella pretendía tener sexo y que por ende no era violación. 😡#ThisIsNotConsent #EstoNoEsConsentimiento https://t.co/nYjHsUlh0p
— Génesis Anangonó (@genestefa) November 15, 2018
https://twitter.com/wootton_chloe/status/1063365112369741824
https://twitter.com/CarlitaMcFly/status/1063402409781796864